«¡Cada adversidad trae consigo la semilla de un beneficio similar o mayor!»
Esta frase la leí en el libro de “Los diez secretos de la riqueza abundante”, del escritor Adam J. Jackson, y he podido comprobar por mí mismo que es una verdad más grande que un templo...
En serio, he comprobado que después de cada adversidad en mi vida se me presentó al menos una oportunidad mucho mayor, para crecer y mejorar mi vida y mi ser...
¿Saben una cosa?, por cada puerta que se nos cierra, hay al menos tres que se nos abren, lo único que ocurre es que estamos tan ofuscados y preocupados por la que se cerró, que no vemos las que se nos abrieron y de esa manera no es posible cruzarla y continuar por el camino de la evolución, del avance, del progreso, de la felicidad...
A mi hace poco me ocurrió lo de a cientos de millones de personas en el mundo, me dejo mi novia... Yo la amaba con todas mis fuerzas, deseaba prosperar al lado suya, soñaba con un futuro feliz, en armonía, pleno de amor y abundancia... pero hace unos meses, el amor por su parte se diluyó como un azucarillo en una taza de te... Así es, me dijo que lo nuestro no tenía ya futuro... los primeros días, las primeras semanas fueron muy dolorosas para mi, y mi alma albergaba la posibilidad de una posible reconciliación... pero nunca se produjo... y al mes decidí volver a mi pueblo y comenzar una nueva vida, una nueva etapa... poco a poco se me van abriendo esas puertas de las que os hablaba anteriormente...
Una puerta ha sido la de una llamada inesperada desde otro país, en relación a mi libro "Encuentra tu Buena Suerte", tengo la posibilidad de editar una primera edición en portugués en Brasil, eso es muy, pero que muy positivo. Otra puerta esta siendo la de que estoy fraguando la posibilidad de hacer terapias de Reiki por mi cuenta en una consultita en mi pueblo, aquí sería el primero en serlo... Y otra puerta está siendo la de la amistad con los amigos de siempre, con la familia que hacía años que no disponía de tanto tiempo para estar con ellos, y he conocido a nuevas personas que me van aportando sabiduría, experiencia, amor...
Y estoy seguro que de ahora en adelante se abrirán muchas puertas más, así que debo estar muy atento a ellas y aprovecharlas...
Recuerden; por cada adversidad hay una semilla mayor que brotará para vuestro bienestar... estén atentos, aprovéchense de ella y crezcan, evolucionen, progresen, sean felices y gocen del amor de las personas que os rodean...
P.d: Tengo que decir que de mi anterior relación sentimental, no guardo ningún tipo de rencor, ningún tipo de mal recuerdo, de mala experiencia, sino todo lo contrario, fueron unos años maravillosos y fui feliz, únicamente que por el factor "x" que sea, se rompió esta bonita relación... Así que no la puedo llamar adversidad, sino una etapa de mi vida más... (Es importante esta aclaración para que vean que una adversidad es adversidad si creemos que lo es... yo en mi caso no lo creo, después de valorarlo detenidamente he sabido que es un aprendizaje para mi evolución y mejora...)
Abrazos
Frank González